Trump, Putin y Venezuela

Desde Alta Mar (Puerto La Cruz)-. “Estados Unidos está del lado de aquellos que desean ser libres”, esta frase corta, precisa y diáfana resume la política del presidente de Norteamérica hacia Venezuela.

Desde que Donald Trump asumió la presidencia del país del norte, la relación de la Casa Blanca con respecto a lo que sucede en Caracas ha cambiado de una forma vertiginosa.

El mandatario estadounidense cambió la correlación de fuerzas en la Organización de Estados Americanos (OEA) y cada vez que habla con un mandatario del continente presenta el caso de Venezuela, lo que pudiera indicar que nuestro país es parte de las prioridades diplomáticas y estratégicas de la administración Trump.

Si comparamos las políticas y actuaciones de Trump con las de su antecesor, Barack Obama, vemos con asombro que el expresidente, tan popular y querido, fue permisivo y hasta cómplice con el régimen venezolano, mientras que el republicano ha levantado su voz y se ha enfrascado en “ayudar a aquellos que quieren ser libres”.

El Jefe de Estado de los gringos no tiene a menos en calificar como un “desastre” a los gobernantes venezolanos y afirmar que “el país ha estado en malas manos por mucho tiempo”.

Al otro lado, el titán rojo: Rusia, que consiguió con Venezuela lo que le fue imposible con Cuba, es decir una “cabeza de playa” para desembarcar económica y políticamente en América del Sur, no ha sido lo suficientemente resteado con su socio caraqueño.

Según la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova, la situación de confrontación social venezolana “no representan un riesgo para la estabilidad en el hemisferio”, no obstante el mismo Putin le pidió a su homólogo Nicolás Maduro, durante una conversación telefónica entre Miraflores y el Kremlin, que “es importante una solución a la crisis dentro de la legalidad”.

Ahora bien, ¿qué harán los rusos en el Consejo de Seguridad de la ONU? ¿Vetarán cualquier iniciativa de los Estados Unidos o simplemente protestarán, como un saludo a la bandera, y dejarán que la iniciativa estadounidense siga? ¿Trump y Putín tendrán el ánimo para luchar por Venezuela?

¿Creen ustedes, apreciados lectores, que Putín abrirá la posibilidad de una reacción norteamericana en el este de Europa, área de influencia rusa, por mantener su “cabeza de playa” en Sudamérica?

Esta historia no termina aún; los titanes se pondrán de acuerdo y Maduro estará como cucaracha en baile de gallina.

Si se acuerdan rusos y norteamericanos ¿qué le quedará al régimen venezolano? Lo más seguro que es la cancillería, dirigida por Delcy Rodríguez, salga a pedir auxilio a Pekín, para que los chinos le echan una mano.

El panorama internacional promete, el cerco mundial aumenta y cada vez son menos los “amigos” que le quedan al sistema venezolano, y esto le pasa porque los “amigos” comprados no son para toda la vida.

Y mientras el mundo sigue girando, mientras las intrigas de palacio y salones diplomáticos continúan su curso, aquí más venezolanos siguen muriendo a manos de la represión, cada vez más venezolanos no tienen nada que comer.




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