Periodismo: orillas del abismo
Columna Mar de Leva
El periodismo internacional está pasando por una encrucijada. El escándalo del News of the word de Londres, un periódico denominado amarillista de un centenar de años en las sobrias calles de la capital inglesa, no sólo ha tambaleado al imperio comunicacional de Rupert Murdoch, sino a la integridad moral del periodismo como institución social en el mundo.
El caso de las escuchas ilegales que se efectuaron en Inglaterra, me trae a la memoria el caso Watergate en la década de los 70, en aquella oportunidad un dúo de reporteros con el apoyo de sus editores iniciaron desde la sala de redacción del Washigton Post una investigación periodística de primer orden que conllevó a la renuncia de Richard Nixon de la presidencia de los Estados Unidos, debido a que su gobierno y su partido, a través de las agencias de inteligencia del Estado espiaron a la convención Demócrata. Hoy en el Reino Unido un periódico, en contraste con el ayer, es el que promovió la intercepción y grabación de ciudadanos, dejando en entre dicho la ética en el ejercicio del periodismo.
Además de la crisis moral que atravesamos es alarmante conocer que decenas de periodistas, reporteros gráficos y afines han sido asesinados, secuestrados o golpeados en lo que va del 2011, denuncia que se ha venido discutiendo en las reuniones del Sociedad Interamericana de la Prensa (SIP).
Todos los periodistas y comunicadores sociales de Venezuela nos tenemos que solidarizar con Silvia Alegrett, quien desde la presidencia del Colegio Nacional de Periodista (CNP) está efectuando una encomiable labor en la defensa de los profesionales del periodismo, quienes hemos sufrido los duros embates de más de 12 años de un gobierno “enemigo” de la libre información.
Recientemente el CNP, con la vocería de la licenciada Alegrett, advirtió que el gremio defendería sus bienes, estás aseveraciones nacen de la amenaza latente que grupos oficialistas han realizado con reiterado “frenesí socialista” sobre la advertencia de invadir la sede del colegio de periodista ubicado en Caracas, para los damnificados. Otro atropello más de los chavistas.
El periodismo está en las orillas del abismo, el amarillismo y sensacionalismo acechando por un lado, los gobiernos anti libertad de expresión acorralándonos por el otro (caso Ecuador), y la violencia de mafias en la sociedad que temen al espíritu investigador del reportero, nos amenazan. Sólo con ética y compromiso venceremos de caer a,l precipicio que despunta en la lontananza.
@jdsolorzano / www.josedionisiosolorzano.blogspot.com / solorzano.dj@gmail.com
El periodismo internacional está pasando por una encrucijada. El escándalo del News of the word de Londres, un periódico denominado amarillista de un centenar de años en las sobrias calles de la capital inglesa, no sólo ha tambaleado al imperio comunicacional de Rupert Murdoch, sino a la integridad moral del periodismo como institución social en el mundo.
El caso de las escuchas ilegales que se efectuaron en Inglaterra, me trae a la memoria el caso Watergate en la década de los 70, en aquella oportunidad un dúo de reporteros con el apoyo de sus editores iniciaron desde la sala de redacción del Washigton Post una investigación periodística de primer orden que conllevó a la renuncia de Richard Nixon de la presidencia de los Estados Unidos, debido a que su gobierno y su partido, a través de las agencias de inteligencia del Estado espiaron a la convención Demócrata. Hoy en el Reino Unido un periódico, en contraste con el ayer, es el que promovió la intercepción y grabación de ciudadanos, dejando en entre dicho la ética en el ejercicio del periodismo.
Además de la crisis moral que atravesamos es alarmante conocer que decenas de periodistas, reporteros gráficos y afines han sido asesinados, secuestrados o golpeados en lo que va del 2011, denuncia que se ha venido discutiendo en las reuniones del Sociedad Interamericana de la Prensa (SIP).
Todos los periodistas y comunicadores sociales de Venezuela nos tenemos que solidarizar con Silvia Alegrett, quien desde la presidencia del Colegio Nacional de Periodista (CNP) está efectuando una encomiable labor en la defensa de los profesionales del periodismo, quienes hemos sufrido los duros embates de más de 12 años de un gobierno “enemigo” de la libre información.
Recientemente el CNP, con la vocería de la licenciada Alegrett, advirtió que el gremio defendería sus bienes, estás aseveraciones nacen de la amenaza latente que grupos oficialistas han realizado con reiterado “frenesí socialista” sobre la advertencia de invadir la sede del colegio de periodista ubicado en Caracas, para los damnificados. Otro atropello más de los chavistas.
El periodismo está en las orillas del abismo, el amarillismo y sensacionalismo acechando por un lado, los gobiernos anti libertad de expresión acorralándonos por el otro (caso Ecuador), y la violencia de mafias en la sociedad que temen al espíritu investigador del reportero, nos amenazan. Sólo con ética y compromiso venceremos de caer a,l precipicio que despunta en la lontananza.
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