Háblale a tus electores
Mar de Leva-. Algunos seudo-eruditos de
la política vacía de pensamiento y de conocimientos en el área comunicacional
se desviven diariamente diciendo
torpemente que “debemos pescar en el voto
chavista”, semejante ignorancia es evidencia del porqué los resultados
electorales no han sido los mejores en los últimos años.
Repasando
algunos conceptos de Joe Napolitan nos encontramos que este “padre fundador” de las técnicas modernas
de comunicación políticas nos decía que en una campaña electoral debes atender
primeramente a tu elector, a lo que llamamos corrientemente el “voto duro”.
Me
atrevería a decir que para tener éxito en el momento electoral debes centrarte
esencialmente en tu voto tradicional, en esos electores que son tu base primordial
para alcanzar los mejores resultados comiciales.
Si
en un proceso político te desgastas en la “pesca”
en el voto contrario puede causar una desmovilización en tu propio electorado
que terminará en un duro revés político-electoral, debido a que tu búsqueda en
el otro lado de la acera tendrá pocos resultados mientras que abandonaste a tu
público primario.
Cuando
sales a la pesca del voto contrario
siempre regresarás con unas “sardinitas”,
mientras que al descuido de tus electores fieles, es decir, al salmón que ya tienes en el bote, por
alguna razón saltará de éste y regresará a las inmensidades del mar.
En
pocas palabras: Te quedarás sin el chivo
y sin el mecate.
Ante
esto es importante que no mal gaste tu tiempo porque al hacerlo correrás un
alto riesgo de no recuperarlo y por ende perderás la elección.
Me
atrevería a decir, siguiendo los ejemplos del pasado y del presente, que debes
invertir el 80% de tus esfuerzos en atender, motivar, inspirar, escuchar y
movilizar a tus electores y el 20% restante dedicarlos a lo que comúnmente
llamamos “los indecisos” o voto “Ni-Ni” que son generalmente los que no
se han inclinado por ningún candidato.
Al
inicio de una contienda electoral el 70% de los electores en las primeras
semanas, a más tardar, ya tienen decidido su voto; esta prematura decisión se
debe a consideraciones plenamente sociales y psicológicas por ejemplo: historia electoral del votante, principios
conceptuales, valores intrínsecos en el elector, entre otros valores
controlables o no por el propio elector.
El
decir la única forma para que un elector del candidato contrario decida votar
por ti dependerá de factores ajenos a tu manipulación es decir: Desencanto por acciones, omisiones o
propuestas del adversario, fallas comunicacionales del oponente, ruido en el
proceso de relaciones líder-masa, entre otros.
Sin
embargo existe otro factor menos técnico que pudiera convertir al elector
oponente en uno tuyo, entiéndase como: EL
MILAGRO, es decir un “cisne negro”,
un hecho tan significativo para el elector o un grupo de electores que lleven a
éste o éstos a votarte, aunque sea con “un
pañuelo en la nariz”.
Ante
esto, comprendiendo que las formas para que “la pesca” en el lado adversario tenga frutos o no, en ninguna forma
dependerá de ti, como asesor, de tu candidato, o de los equipos de campaña,
entonces dedícate a lo que sí es importante: TU GENTE.
Si
tu estrategia busca incidir en el voto del oponente, para elevar así las
posibilidades de tu elección, entonces no invites al votante contrario a
apoyarte, invítalo indirectamente a la abstención, es más factible que un
elector de una tendencia no acuda a las urnas de votación a que vote
efectivamente por aquello que rechaza.
Por ejemplo: Mercedes es una joven de 22 años, por
tradición familiar, padres y hermanos izquierdistas, porque no ha conocido en
Venezuela a ningún otro líder que Chávez, ni ningún otro partido que el Psuv,
tiene 15 años escuchando en casa, por televisión y en su entorno lo malo que
fue el pasando antes de la revolución, ¿cómo pedirle a ella que vote por la MUD
si esta instancia representa todo lo malo que conoce?
Aunque
le expliques sobre la mala situación, que por cierto ella conoce porque la vive
en carne propia, no entenderá tus razonamientos porque sencillamente su esquema de valores creará una barrera de
protección subconsciente y en vez de motivarla a votarte lo hará por lo que
considera bueno, en este caso, el oficialismo.
Para
finalizar te recomiendo que no mal gastes tus esfuerzos. ¡Ven y activa a tu
elector! ¡Enamora a la dama que sí te quiere y no aquella que suspira por otro!
Twitter:
@jdsolorzano
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