Consideremos y reflexionemos

Desde Alta Mar-.  Ya inició el proceso rumbo a las primarias de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y es un momento idóneo para que consideremos las características y factores que existen en cada uno de los aspirantes a ser nuestros representantes legislativos.

Votar por un candidato debe responder a un proceso lógico de razonamiento.

Por ejemplo debemos premiar la constancia, energía, decisión y firmeza de los dirigentes de la Unidad.

En las primarias tenemos moralmente la responsabilidad de elegir a los mejores combatientes democráticos para que nos representen en la Asamblea Nacional.

Existen candidatos que tal vez no respondan a nuestras inclinaciones ideológicas o percepciones personales, no obstante son los que por su capacidad intelectual y/o política los necesarios para hacer vida en el parlamento.  

Los diputados demócratas tienen que ser hombres y mujeres que sientan a Venezuela y la situación que se está viviendo en todos los sectores de clase popular y media.

Lo que si debemos considerar, muy profundamente, son las candidaturas de los presos políticos.

Ellos han dado su libertad y bienestar personal en aras del sueño colectivo de la libertad nacional y es el momento de retribuirle todo su esfuerzo votándoles en las primarias.

En el país existen candidatos que alzan las banderas de la libertad de los secuestrados por el régimen y otros que son ellos mismos presos políticos, como es el caso de Gerardo Resplandor, joven estudiante y dirigente que se encuentra encarcelado injustamente en los calabozos del Sebin.

En la circunscripción 4 de Anzoátegui, que la integran Puerto La Cruz, Lechería Guanta, Resplandor colocó su nombre para ser diputado y es un honor que seamos los portocruzamos, lecherienses y guanteños los que podamos contribuir, con nuestro voto, a la liberación de este gran luchador.

Resplandor no solo habla de la libertad de los presos políticos sino que él mismo es víctima constante de los atropellos del régimen.

Resplandor habla de la libertad más allá de los presos políticos, él está planteando la liberación nacional a través de un parlamento con una mayoría abrumadora de la democracia que permita enrumbar al país hacia la salida definitiva de la crisis política, social y económica en la cual la sumergió el madurismo.

El joven dirigente no ha huido de la lucha y su voz ha sido la actividad incesante a favor de una Venezuela distinta, esa que usted y yo soñamos todos los días.

Consideremos las características de los distintos candidatos a levantar las banderas de la unidad en la venidera consulta parlamentaria.

Reflexionamos sobre quien en verdad merece por su constancia, capacidad y dotes ser parte de la puja que se librará en la próxima legislatura nacional.

Quienes han corrido en los momentos difícil no deberían ni siquiera optar por una curul en el parlamento, porque quien no ocupó su lugar en la batalla diaria por la libertad de Venezuela, quien abandonó su puesto de lucha en la calle ahora no puede venir a profanar con su arrogancia la labor de quienes sí se sacrificaron.

Lo invito cortésmente a reflexionar sobre el perfil de cada uno de quienes serán nuestros candidatos y con el favor de Dios Todopoderoso los próximos parlamentarios de la nueva Asamblea Nacional.

La luz de la verdad empieza a resplandecer.