El Gobierno y las redes sociales
Mar de Leva-. “Los medios de
carácter público y oficial tienen la obligación, también en la web 2.0, de ser
la vanguardia de las nuevas tecnologías. Para ello, resultará imprescindible
rodearse de los mejores profesionales y formar constantemente a los empleados y
miembros de la Institución”.
Quise iniciar el artículo de esta
semana que una frase extraída de la página web www.innovacion.gob.pa del post “10 Recomendaciones para el uso de redes
sociales por instituciones de gobierno” porque sin duda son las redes
sociales unos de los fenómenos que más han impactado las relaciones entre el
Estado y la Sociedad.
Ya los mecanismos piramidales de
la información quedaron totalmente en el pasado, la era de las comunicaciones
digitales le han dado un duro golpe a quienes pretendía trabajar y gobernar
desde el “oscurantismo” de la
información.
Hoy cualquier ciudadano con
acceso a internet y desde la comodidad de su casa o desde cualquier lugar,
mediante la telefonía móvil, puede comunicarse con las autoridades y expresar
su inconformidad o criterios sobre cualquier tópico de interés colectivo.
El poder de las comunicaciones
está al alcance de un tuits o post de Facebook. Hoy en día un bloguero puede
ser un temible crítico, todo en el marco de la viralidad de sus comentarios y
la repercusión de sus opiniones en el ámbito local, regional o nacional.
De allí la importancia que los
Gobierno, seria y responsablemente, entren en la era de las comunicaciones 2.0
bajo la óptica correcta, es decir, en la nueva etapa de las comunicaciones
nadie puede convertirse en el “todopoderoso”, en el “dueño de la verdad”, sino
que el ciudadano es igual a la institución y ambos deben entablar un diálogo
para expresar sus opiniones y entenderse.
La democracia ha llegado a las
comunicaciones, ya las institucionales, desde una pequeña alcaldía hasta las
presidencias de las repúblicas deben estar al tanto de la importancia de las
relaciones con la sociedad digital, ya que desde hace algún tiempo las
comunidades online dejaron de ser una trincheras de los amantes de la
tecnología y fanáticos de la “era de la galaxias” para convertirse en la plaza
pública de los nuevos tiempos.
La web 2.0 de una alcaldía, gobernación
o presidencia de la república son mecanismos indispensables no solo para
difundir ideas, proyectos, iniciativas, sino para escuchar de forma activa a
los ciudadanos, de hacerlos partícipes de las decisiones, de abrir las puertas
de la alcaldía y “horizontalizar” el
ejercicio del poder.
En el mismo texto que cité al
principio, por cierto escrito por Temístocles Arjona, se lee que “uno de los
principales puntos fuertes de la utilización de redes sociales por parte de los
organismos públicos es la posibilidad de promover el desarrollo y solidaridad
de la comunidad mediante actividades e iniciativas comunitarias, promovidas por
las Instituciones del Gobierno”.
Porque las redes sociales no sólo
nos permiten decir lo que hacemos, no sólo es una forma de recibir constante
información de la opinión pública, sino que además puede ser un motor indefectible
para la relación de trabajo entre los organismos sociales y comunitarios y la
visión de gobierno de determinada institución.
El mundo de las comunicaciones
digitales son en sí el mañana presente hoy; en la medida que pase el tiempo las
aplicaciones conocidas: Twitter, Facebook, Instagram, Fickr, Keek, y aquellas
que aún están esperando ser descubiertas, serán más importantes y servirán para
que los gobiernos sean más participativos, lo que los obligará a aplicar nuevas
técnicas de comunicación y de interacción.
Twitter: @jdsolorzano
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