UNIDAD
Desde Alta Mar-. UNIDAD… Sí, en mayúscula. De esa forma tenemos que
escribirla.
La unidad va más allá de una
palabra, de la unión de unas letras, su significado es altamente profundo,
sobre todo para la actual situación que está atravesando Venezuela.
Cuando hablamos de Unidad no nos
referimos a un eufemismo político sino que hacemos referencia a una visión de
trabajo, a un concepto de vida, hacemos alusión al deber ser ético y responsable
de quienes están llamados a transformar al Estado.
La plataforma que aglutina a los
factores políticos, sociales, gremiales y comunitarios que se oponen al sistema
de Gobierno que rige, mientras tanto, los destinos de la república, escogió el
calificativo de “Unidad” porque éste sin duda describe la misión que poseen
para con la república.
La Mesa de la Unidad Democrática
no es un club, ni nunca debe serlo. En esta plataforma debe reinar el debate y
los esfuerzos para el rescate de la nacionalidad pérdida en los últimos 15
años.
Tenemos que repudiar, con las
fuerza del alma y de la razón, cualquier intento de enanismo político y de sectarismo
que broten del seno de una Unidad que transciende a los partidos y se centra
cada día más en las ansias de un pueblo
que está claro que la vía unitaria y democrática es la forma de alcanzar la
salida del actual gobierno.
Las mezquindades tienen que ser
sepultadas debajo del peso del compromiso nacional de cada uno de quienes
estamos decididos a seguir la lucha por una Venezuela de oportunidad para todos
los venezolanos.
En Anzoátegui se está trabajando
en procura de sumar nuestros granitos de arena en la búsqueda de un camino
fructífero de cambios sociales, políticos y económicos de la nación; es la
hora, más que ayer, de dar un paso al
frente y de construir gallardamente una UNIDAD que nazca del barrio, de la
comunidad, con inspiración parroquial y vecinal.
Algunos se empeñan en centrarse
en críticas internas, cuando debemos
dejarle ese rol a un madurismo decrépito y lánguido, que se está fracturando
por todas partes; tenemos que dejarle a ellos, quienes se están peleando por la
botella vacía de la revolución, que terminen de aniquilarse entre ellos,
mientras de este lado de la acera, en alianza con la mayoría de los venezolanos
de a pie, continuemos la senda de renacionalización política y patriótica de la
república.
Dejémosle a los camisas rojas su
guerra interna y evitemos de este lado de la Venezuela actual, donde trabajamos
quienes en verdad amamos esta tierra, declaraciones u opiniones que le hacen un
flaco favor a la unidad y ayudan a la recuperación flácida de un régimen que
desde hace rato está dando bocanadas mientras se ahoga.
La UNIDAD es una forma, es la
salida misma a lo que estamos padeciendo en este país. Le hago un llamado, como
ciudadano, como periodista, como venezolano, a que nos unamos más que nunca con
el firme propósito de construir firmemente la ruta hacia la Venezuela que nos
merecemos.
Twitter: @jdsolorzano
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